La campaña del Black Friday 2019 está en todo lo alto, mañana se celebrará el «Viernes Negro» y el próximo lunes llegará el fin de fiesta con el Cyber Monday. Como en cualquier evento masivo, los ciberdelincuentes intentan aprovecharlo con todo tipo de ataques y además de intentar encontrar buenas ofertas, el consumidor tiene que cuidar también los aspectos de seguridad.
Es probable que estés ya saturado de tanta oferta Black Friday, porque no hay minorista grande o pequeño que no lo utilice como reclamo. Por si no lo conoces, comentar que tiene sus orígenes como “Viernes Negro” en la década de 1960 en Filadelfia y su objetivo principal como ahora era promover una jornada de compra masiva ofreciendo grandes descuentos en todo tipo de productos.
En aquella época no existía el comercio electrónico y la jornada se celebraba exclusivamente en tienda física y se limitaba a un solo día, siempre el viernes siguiente al Día de Acción de Gracias, uno de los festivos más importantes en Estados Unidos que se celebra el cuarto jueves de noviembre) y como el pistoletazo de salida para la campaña navideña, la más importante del año para el sector comercial.
La llegada de Internet cambió todo. Gigantes como Amazon crearon una jornada concreta como equivalente on-line al Black Friday, que con la denominación de “Cyber Monday” se celebraba exclusivamente el lunes posterior. Hoy en día, el Black Friday ha perdido totalmente su esencia inicial, no se limita a un sólo día y tampoco a la tienda física, ya que el gran impulso del comercio electrónico ha difuminado la línea entre lo virtual y lo físico. En España y en general Europa, la compra por Internet arrasa en esta campaña de compras.
Seguridad en el Black Friday 2019
- Utiliza contraseñas robustas. No reutilices la misma contraseña dos veces. Plantéate utilizar un gestor de contraseñas para mejorar tu experiencia online, a la vez que te mantienes seguro.
- Evita las Wi-Fis abiertas. Las redes Wi-Fi de acceso libre o gratuito no son seguras: los cibercriminales pueden hacerse con datos transferidos a través de redes WiFi desprotegidas, incluyendo números de tarjeta de crédito, contraseñas, información bancaria y más.
- Cuidado con las «Webs parecidas». Los atacantes crean páginas web parecidas que imitan las de marcas conocidas. Estas webs fraudulentas pueden vender productos falsificados (o inexistentes), estar infectados con malware o robar dinero o credenciales.
- Evita potenciales ataques de Phishing y Smishing. Los correos de phishing llevan a webs no seguras que recopilan datos personales, como credenciales de acceso o datos de tarjetas de crédito. Estate atento también a los intentos de phishing por SMS -también conocidos como ‘smishing’- o a mensajes a través de redes sociales. Y mensajería instantánea, cada vez más extendida.
- No hagas clics en los enlaces. Ve directamente a la página de la oferta anunciada escribiendo su dirección web directamente en tu navegador. Si se trata de códigos promocionales especiales, escríbelos y comprueba si son legítimos.
- Verifica antes de comprar. Los anuncios, webs y apps fraudulentas pueden ser difíciles de identificar. Cuando descargues una nueva app o visites una web no habitual, dedica algo de tiempo a leer reseñas sobre la misma, así como cualquier queja de los usuarios.